Es la segunda parte de Una jaula de oro, de Camila Lackberg.
Una novela de suspense, engaños y mentiras que, como frecuenta a hacer la autora, se basa en el pasado y el presente.
No está mal porque se lee rápido, pero tampoco sorprende porque es el estilo de las otras que ha escrito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario